
General público
Por el momento guarda la estructura simétrica esperada. Draghi, primero con sus declaraciones y después con su actuación, ha conseguido estirar la proyección al máximo y dilatar el timing. Hay cansancio y divergencia bajista, a pesar de ello puede sudecer, al igual que ocurrió en el lado simétrico de bajada, que el precio aguante en estos niveles varias semanas.
Nasdaq es un caso único en la historia. De 1.975 a 2.000 pasó de 50 a 5.000, o lo que es lo mismo se multiplicó por 100 en 25 años. La corrección de onda A se llevó el 80% de la subida en menos de tres años desde entonces construye una lenta onda B y esperamos que llegue al doble techo en el 2.017. Después la onda C...no nos atrevemos a hecer una previsión, pero va a ser un momento muy delicado.
Todo apunta a que acabaremos teniendo una situación muy seria cuando llegue el momento en el que los Bancos Centrales hayan inundado el mercado de papel, los tipos ya no puedan reducirse y las deudas sigan en un nivel histórico.
Quizá la próxima lección sea que el papel no se come. Los inversores de hoy viven una situación muy especial y hay que ser muy hábil y tener nervios de acero, oponerse a los Bancos Centrales es una temeridad pero acompañarlos en su viaje hacia la nada no lo es menos.
Es uno de los valores que mejor representa el ciclo que venimos siguiendo. Colabora a la fuerza actual del Ibex marcando máximos de onda progresivamente. Esta próxima a la zona donde debe concluir el tramo "a" de la onda "B". Tras los recortes de onda intermedia seguirá ascenciendo hasta el 2.017. El resultado final cuando llegue la corrección de onda "C" que complete la onda IV de ciclo será una onda bastante plana, posiblemente inclinada a la baja, de aspecto similar a la onda 4 que vemos en el gráfico dentro de la onda III.
Un fractal superior de aquella onda que duró 5 años frente a los 15 que debe durar esta.
Vamos a llegar a la reunión del BCE con la estructura diagonal perfectamente trazada. Cinco ondas de tres impulsos cada una, milimétricamente canalizadas y proporcionales que comenzó a desarrollarse el 9 de octubre y que representa un modelo que podrÃa incluirse en libros didácticos por su precisión y estructura. Su perfección es el único pero que puede ponérsele, no creo que haya un sólo analista de Elliott que no la esté viendo. Una estructura tan bien plantada es improbable que no funcione, pero lo evidente tampoco suele suceder en Bolsa, nuestra sensación es que acabará por surtir efecto y mandará al S&P como poco al 1.737 y quizá al 1.645, ahora bien, por su evidencia lo normal es que se comporte en principio de manera diferente a lo esperado aunque termine desembocando en donde deberÃa, es la máxima habitual en Bolsa 2+2=5-1, acaba pasando lo que debe pasar pero de forma distinta a lo esperado.
Cuando confirmamos la previsión de suelo en el 2.012, sostuvimos que la onda alcista que se iniciaba tenderÃa a la simetrÃa con el movimiento bajista precedente, es algo bastante natural cuando se suceden ondas intermedias, un doble a-b-c en direcciones contrarias. Dos años después vemos que la simetrÃa se produjo y es sencillamente asombrosa en su perfección, aunque suele respetar la estructura no es normal que sea tan precisa como lo está siendo, en algún momento debe llegar algún movimiento fuera de guión. Estamos en un punto calve para comprobar hasta que punto el mercado recuerda el camino de vuelta. Creemos que la simetrÃa segurirá sosteniéndose durante la onda B, aunque es improbable que lo haga con la misma exactitud. Debe ser la onda C al alza la que rompa las correlaciones.
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Refleja con mucha mejor fiabilidad que el propio Ibex que el impulso A de la onda de rebote terminó en enero de este año. La corrección es lateral hasta el momento durante los últimos cuatro meses. Este es el planteamiento que esperábamos, tiene que acabar el tramo b de rebote y después realizar el c a la baja, esto implica meses todavÃa para completar la corrección de onda B. La diferencia que se aprecia con el Ibex se debe a los puntos que han aportado básicamente Santander, Repsol e Iberdrola que le han dado al Ãndice aspecto de cuña alcista cuando en realidad llevamos cuatro meses ya de corrección.
Subimos el gráfico del Ibex en mensual continuo para observar con sencillez la lÃnea base de nuestro planteamiento.
Esperábamos un techo de onda III en el 2.007 que se produjo, a partir de ahÃ, cinco años a la baja hasta el 2.012 donde debÃa encontrar suelo la onda A de un proceso bajista de onda IV, asà fue, a continuación cinco años de rebote hasta el 2.017 que debÃan dividirse en una primera onda de rebote del 2.012 al 2.014 con un lÃmite de ascenso en los alrededores del 11.000, seguida de una onda correctiva lenta y suave, menos de un año, con un lÃmite de bajada en el 8.600, es la parte en la que estamos actualmente. A partir de ahà nuevo impulso alcista del 2.015 al 2.017 para concluir la onda de rebote 2.012-2.017, el objetivo final de esta onda lo afinaremos a medida que se aproximen las fechas esperadas, 13.000 es la hipótesis de la que partimos, pero podrÃa ser más, lo iremos viendo. Finalmente una onda C a la baja que ponga fin a la onda IV que se dilatarÃa del 2.017 al 2.022. Posteriormente un nuevo mercado alcista.
Actualmente estamos en la parte más pesada, el mercado ha consumido gran parte de la primera onda de rebote desplazándose del 5.900 en julio del 2.012 al 10.744 en el dÃa de ayer. PodrÃa hacer más llegando a la zona 11.000 pero después tendrÃa que poner en marcha la onda correctiva, 8.600 es el lÃmite de bajada pero vemos en el gráfico continuo que los cierres mensuales andan por los niveles 9.200-300.
En esta ondas de rebote los valores principales se mueven en proporciones similares a los Ãndices pero los valores medianos y pequeños que perdieron el 80-90 de su precio en la primera onda de bajada recuperan grandes porcentajes, muy superiores a los Ãndices como ya hemos venido comprobando, por eso hemos centrado nuestra estrategia en ellos con muy buen resultado. En el momento actual la mayorÃa está en plena corrección y hay que esperar a que los Ãndices lleguen al punto esperado para volver a hacer cartera.